viernes, 25 de enero de 2008

Pepe y su carro

Inconfundible sonido a tuercas desajustadas y alguna que otra pieza que le debe faltar al carro de Pepe anuncian su llegada cada mañana al Kiosco.
Chileno él, es mi repartidor de Sade y són de las pocas cosas que te animan los madrugones que nos pegamos en el quiosco.
Son tres o cuatro frases que nos cruzamos todos los dias, poco para llegar ha hacer amistad, pero como es casi a diario, acabas por tener una cierta amistad con ellos.

- Hoy no sale la play.
- Vale !!!

Al dia siguiente...

- Pepe, ayer me faltaron las play.
- No jodas, ahora busco en el carro a ver si te las encuentro.
.......
- Chico lo siento pero no las encuentro , voy demasiado cargado. Mañana te lo arreglo.
- Vale, pero no te olvides, sino mañana no te doy ninguna pastita eh!! (tengo una panaderia justo enfrente del quiosco)

Al dia siguiente....

- Te acuerdas de las Play ?
- Joder, ni me he acordado.
- No te preocupes vienieron abonadas en el albaran de ayer.
- Ostias, es verdad, no te dije que no salian ?
- Pues quizas, pero es que deberia estar aun dormido.

Este ejemplo, que supongo nos pasa a todos, ilustra perfectamente como esta nuestro sector. En un negocio que se mueven miles de millones de Euros, no podemos basarnos en nuestra memoria y en la buena fe de unos y otros.

Debemos de exigir unos minimos de calidad, que las distribuidoras habrian de cumplir. Todas las empresas abogan por unas ISO en calidad, en el sector que les pertoca. Y las distribuidoras, que calidad tienen ?. Ninguna, ni piensan tenerla. Y saben porque? Porque el fin de la calidad es el servicio al cliente, y ellas no tienen clientes, tienen agujeros negros que tragamos y tragamos.

PD. Un saludo Pepe, que te lo pases muy bien este mes de vacaciones en Chile, pero vuelve pronto, porque tu sustituto me deja a deber mas material del que me trae.

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